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miércoles, 22 de abril de 2009

Nuestro Centurión


"...por tales razones ordeno a mi centurión Quinto Cornelio que conduzca públicamente por las calles de Jerusalén a dicho Jesús, con dos ladrones homicidas, atado y, después de haber sido azotado, vestido de púrpura y coronado de espinas, llevando la cruz sobre sus hombros, a fin de que sirva de escarmiento a los malhechores..."

2 comentarios:

Alfonso Donoso Barella dijo...

Quinto Cornelio... ¿cuántas dudas pudieron asaltarlo a ver como la gente se manifestaba ante el titubeante andar del Nazareno? ¿Qué pudo pensar en aquellos instantes? ¿Sólo cumplió con la obligación de ejecutar la orden dada por Pilato?

Quinto Cornelio otro interesante personaje que fue testigo de la horrenda crueldad que con Él hicieron.

Quinto Cornelio es muy probable que tan solo se limitara a obedecer y continuar con su vida. Uno más de los tantos que, teniendo ante sus ojos la misma Gloria, el amor más sublime, la presencia más divina, no supo (no sabe) reconocer tanto cuanto ante el se muestra.

Felipe Torres dijo...

Y cuantos Quintos Cornelios hay en la actualidad, que sigen teniendo a Jesus ante ellos y lo seguimos ignorando...
"no hace falta tener ojos para ver, sino corazon para sentir"

saludos