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martes, 16 de noviembre de 2010

Conociéndonos


Nombre: Antonio Manuel Medina Gómez

Nacido en: la calle Nadal, de la ciudad de Úbeda el 30 de julio de 1979

Hermano de: (por orden de antigüedad) Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Señor en Su Sentencia y María Santísima de las Penas, y Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestra Señora de Gracia.

¿Cuando comenzó su andadura cofrade?
La mañana del 3 de abril de 1983, cogido de la mano de mi padre, vestido con la túnica blanca y roja de la Cofradía del Resucitado, andando el camino que iba desde mi casa de la Puerta del Sol hasta la calle Llana de San Nicolás, donde mi padre estaba citado para recoger su “Resurrexit sicut dixit”. Mi andadura cofrade comenzó haciéndose realidad mi sueño de niño de “acera”, cogiendo la mano de otros niños que vestían igual que yo, en una mañana soleada de Domingo, marcando el paso que me marcaba el eco cercano de los tambores y soñando con llegar a ser “grande” para taparme la cara con el capuz y tocar un tambor “de verdad” con mis manos.

¿Qué recuerdo guarda de aquella época?
Asomarme al dormitorio de mis padres en la tarde del Sábado de Gloria y ver mi túnica encima de su cama; la cara que ponía mi madre cuando me probaba el capirucho de cartón y verificaba mi crecimiento; la bajada por la Avenida Antonio Machado cogido de la mano de mi padre viendo cómo de sus afluentes iban naciendo personas vestidas igual que nosotros; aquel “pórtate bien” que mi padre decía cuando me dejaba en el corro de los niños; el mirar constante hacia atrás para mirar al Señor. Pero si hay un recuerdo que prepondera sobre los demás es aquel que dibuja en mi interior aquella tarde de Domingo de Resurrección, prensada por el peso agobiante de unos nubarrones grises que ya se tornaban en negros, realzados por el contraste de los tejados aún nevados, y que no tardaron en soltar su furia de granizo nada más que el tiempo discurrido en un andar de San Nicolás a la Trinidad, y cómo pudo mi padre, entre el tumulto y la agitación, encontrarme y cogerme entre sus brazos para llevarme a resguardo de los portalillos de la Corredera, y ver desde allí, mientras caían por mis mejillas lágrimas de terror y desilusión, como Cristo Resucitado y su madre de la Paz subían el monte de la Trinidad entre la desesperación de todos los que estábamos allí presentes.

¿Actualmente cómo participa en la Semana Santa?
Participo de la única manera en la que puedo y debo hacerlo, pues no concibo mi vida sin este duro menester de anhelar su llegada entre amigos, hermanos y trabajo, a veces, sin descanso. Durante los días de Semana Santa hago penitencia en las dos cofradías de mi corazón (me di de baja de mi primera cofradía, la del Resucitado, cuando lo hizo mi padre), saliendo de costalero bajo el amor de Cristo Sentenciado desde sus comienzos y bajo el amparo de María Llena de Gracia desde hace seis años. Actual y anualmente cometo las funciones de Vocal de Formación, Vocal de Patrimonio y Cronista en la Hermandad de la Gracia.

¿Cómo ve el mundo cofrade actual?
Con el optimismo que me caracteriza. Optimismo que entre otras razones se nutre de una realidad ilusionante y prometedora en este mundo cofrade del que me siento preso: las cofradías crecen, sus patrimonios aumentan en número y valor, el mimo y el decoro con el que se lleva a cabo cualquier actividad relativa a una vida de hermandad plena y fértil son conceptos obligados en el funcionamiento de nuestras hermandades de hoy. Cierto es que deambula en los mentideros por donde nos movemos la opinión contraria, la que habla de falta de participación activa, de pérdida de valores cristianos en los integrantes de la hermandades: dudas e inquietudes propias de personas realmente implicadas en sus cofradías que somos los que argumentamos estos principios basándonos en el día a día de nuestras hermandades. Hay que echar una pequeña mirada hacia atrás e intuir que todos estos problemas siempre han existido, y que en el pasado existían estos y, quizá, otros problemas que hoy en día no se suceden. Hay que ser optimista, respetar, aunque sea lógico no compartir, los distintos tipos de Fe que hacen que una persona se haga hermana de una cofradía, su manera de vivirla; a nosotros sólo nos queda, llamo nosotros a los “frikis” de la Semana Santa, disfrutar de aquello que queremos, del trabajo bien hecho que nos queda por hacer y alegrarnos enormemente cuando descubramos alguna persona que quiere seguir este camino de “tontos” que nos solapa nuestro tiempo libre y nuestros pensamientos ociosos. Los que estamos metidos difícilmente salgamos.


¿Qué cree que falta y qué cree que está de más?

Aquí seré conciso y claro: falta ilusión; ilusión por trabajar, ilusión por proyectar, ilusión por compartir; o trasladar esa ilusión que sufrimos sobretodo en la Cuaresma, a todos los días del año. Y, por supuesto, está de más el postín, la fachada, la vanidad, el farol, los aires de suficiencia, en fin, la falta de modestia y de humildad.

¿Alguna anécdota que le haga esbozar una sonrisa?
Si me proyectaran un video de mi vida cofradiera y pudiera ver la cara que puse cuando tuve en mi casa mi primer tambor, o la que se dibujó debajo de aquella parihuela de ensayo el primer día que intenté ser costalero, o la de timidez y miedo la primera vez que me senté en una mesa como miembro de una Junta de Gobierno. Anécdotas tengo tantas que no sabría con cual quedarme.

¿Cómo se ve dentro de unos años?

Espero que en la misma tesitura en la que me encuentro ahora: pleno de ilusión y entregado a un mundo en el que soy feliz trabajando. Seguir vistiendo mi corazón con un costal y una faja; y transmitiendo a mi hijo Gabriel los conceptos, valores y sentimientos con los que en mi infancia jugué, en mi juventud aprendí a disfrutar y ahora y siempre preservaré como una vitamina esencial en el desarrollo de mi espíritu. Y felicitando a diestro y siniestro estas perennes vísperas en las que vagamos sin solución.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ilusion y humildad...en fin.Para el unico articulista que he leido todo a lo largo de su carrera...paz y bien hermano como le gusta a Santi.Ea